Tribus de Etiopía:
Los Hamer, el salto de la vaca y las mujeres azotadas.
En esta segunda entrega sobre el país de los Hamer, la tribu más
numerosa de las que habitan el valle del río Omo, visitaremos
sus coloridos mercados y algunas de sus ancestrales tradiciones,
como el “Ukulí Kulá”, o salto de la vaca, una ceremonia famosa
en toda África y una más de las costumbre atávicas de este
misterioso continente. |
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19-8-2.011 |
Los Hamer son hábiles recolectores de miel. Durante siglos buscaron los
panales salvajes que las abejas construyen en los huecos y ramas de los
árboles pero no tardaron en descubrir que podían fabricar ellos mismos
estos panales y colgarlos de las ramas a salvo del ataque de los
animales, y así, casi sin quererlo, se convirtieron en los mejores
apicultores del continente.
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NIKON
D700 |
Focal:
70 mm. |
Diaf.:
f 1:7,1 |
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Para realizar los
panales cortan troncos de medio metro de diámetro aproximadamente, les
quitan la corteza y los vacían. Así obtienen un cilindro en cuyo
interior colocan tablas separadas entre sí para que las abejas depositen
su fluido viscoso.
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NIKON
D700 |
Focal:
52 mm. |
Diaf.:
f 1:10 |
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La abeja produce tres
veces más miel que la que necesita para sobrevivir y los Hamer, que lo
saben, aprovechan este excedente para cubrir sus necesidades. Recolectan
para su consumo pero siempre dejan una cantidad suficiente para no
perjudicar el desarrollo de la colonia de insectos. Toda una lección de
aprovechamiento sostenible de los recursos.
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NIKON
D700 |
Focal:
26 mm. |
Diaf.:
f 1:9 |
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Aquí, como en otras
culturas, la miel es un producto muy valioso, casi sagrado, ya que junto
con la caña de azúcar son los dos únicos endulzantes de los que pueden
disponer. Ambos productos se consumen sin ningún tipo de manipulación:
la miel tal y como se recolecta, en bloques, mientras que la caña de
azúcar se corta con el machete, se pela y se muerde directamente para
extraerle el jugo.
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NIKON
D700 |
Focal:
40 mm. |
Diaf.:
f 1:5,6 |
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Como en todas las
comunidades el ser humano necesita productos de los que no dispone, ese
es el origen de los mercados, y los de los Hamer son ciertamente
espectaculares, en especial los de Turmi y Dimeka, magníficos
escaparates para observar la cultura y costumbres de esta etnia.
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CANON 5D |
Focal:
115 mm. |
Diaf.:
f 1:2,8 |
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A estos mercados,
generalmente semanales, se acercan tribus de todos los poblados de la
región. Se necesitan, dependen del resto y en ellos crean lazos sociales
vitales para su supervivencia ya que viven muy aislados.
Salvo las conchas marinas y algún otro producto todo lo que se expone es
de la región: vegetales, especias, sorgo, telas, café, tabaco,
calabazas, herramientas o simplemente pigmento ocre en polvo para
ponerse más guapa.
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CANON 5D |
Focal:
123 MM. |
Diaf.:
f 1:6,3 |
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CANON 5D |
Focal:
168
mm. |
Diaf.:
f 1:6,3 |
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En una cultura tan
cerrada y antigua donde los bienes materiales son escasos el trueque es
la transacción más frecuente, aunque no es extraño usar el birr, la
moneda nacional etíope, para negociar. No hay clases sociales puesto que
nadie produce ni almacena nada en grandes cantidades, nadie es
autosuficiente, su hábitat no se lo permite.
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CANON 5D |
Focal:
105 mm. |
Diaf.:
f 1:2,8 |
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CANON 5D |
Focal:
200 mm. |
Diaf.:
f 1:6,3 |
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Las transacciones son
muy pequeñas porque compran sólo lo que necesitan y lo que pueden
transportar; de hecho es curioso observar que las vendedoras ocupan
mucho más espacio que la mercancía que exponen.
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NIKON
D700 |
Focal:
24 mm. |
Diaf.:
f 1:9 |
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Los mercados Hamer son
el punto de reunión social más importante. Aquí comercian con sus
productos pero también conocen gentes de pueblos lejanos e incluso de
otras etnias.
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CANON 5D |
Focal:
160 mm. |
Diaf.:
f 1:6,3 |
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El mercado es para comprar cambiar o
vender, pero también es una ocasión inmejorable para que las y los
jóvenes luzcan palmito, por eso el día de mercado se preparan a
conciencia con sus mejores galas. Fruto de este contacto surgen la
mayoría de nuevos matrimonios.
Las muchachas solteras se distinguen fácilmente -no llevan collar
metálico- y saben que son observadas por sus futuros pretendientes.
Ellos no pierden detalle y calculan las posibilidades de éxito que
pueden tener en la conquista de la elegida; en esto sí que nos parecemos
a los Hamer sólo que nosotros lo hacemos en bares y discotecas…
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CANON 5D |
Focal:
160 mm. |
Diaf.:
f 1:6,3 |
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CANON 5D |
Focal:
165 mm. |
Diaf.:
f 1:3,2 |
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En la cultura Hamer la
mujer no tiene derecho a decidir quién va a ser su marido, son los
padres quienes lo escogen. Generalmente esta elección va unida al número
de vacas que el pretendiente esté dispuesto a dar como dote a la familia
de la novia.
Este precio hace que muchas jóvenes tengan que casarse en contra de su
voluntad con hombres de edad muy avanzada, que son los que más ganado
tienen, teniendo que renunciar al muchacho con quien realmente les
gustaría desposarse.
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CANON 5D |
Focal:
70 mm. |
Diaf.:
f 1:2,8 |
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El hombre puede casarse
con cuantas mujeres desee siempre que las pueda mantener con la única
condición de que ellas sean Hamer; también debe cuidar de las esposas o
viudas de sus hermanos en caso de que éstos se ausenten o fallezcan.
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